El estudio desmiente el mito del “fumador social” al encontrar que incluso un consumo bajo y esporádico incrementa significativamente las probabilidades de sufrir eventos cardiovasculares graves.
Madrid, España – Una investigación a gran escala, realizada por un consorcio de instituciones internacionales y publicada en la prestigiosa revista The Lancet Public Health, ha emitido una seria advertencia: fumar de forma ocasional o en dosis muy bajas no es una alternativa segura al consumo diario. El estudio, que analizó datos de cientos de miles de personas, concluye que el riesgo de sufrir un infarto agudo de miocardio y de muerte por enfermedad cardiovascular se dispara incluso con el consumo de unos pocos cigarrillos a la semana.
El hallazgo principal desmantela la creencia popular de que el llamado “fumador social” o esporádico está exento de los graves daños a la salud asociados al tabaco.
“Observamos que el aumento del riesgo de infarto es casi tan alto en aquellos que fuman un cigarrillo al día como en los que fuman veinte. Esto demuestra que no existe un umbral seguro para el consumo de tabaco,” afirmó la Dra. Helena Vargas, coautora del estudio.
Impacto Casi Tan Grave como Fumar Mucho
Los investigadores compararon a personas que nunca han fumado con grupos clasificados por su frecuencia de consumo:
- Fumadores diarios: El riesgo de sufrir un evento coronario es bien conocido y muy elevado.
- Fumadores ocasionales (menos de 7 cigarrillos a la semana): Este grupo presentó un riesgo de infarto y muerte por causas cardiovasculares que era entre un 75% y un 85% del riesgo observado en los fumadores habituales.
Esto sugiere que los mecanismos biológicos del daño cardiovascular se activan de manera casi inmediata y total, incluso con una exposición mínima a las toxinas del cigarrillo. La nicotina y el monóxido de carbono dañan el revestimiento de los vasos sanguíneos y aumentan la probabilidad de formación de coágulos, independientemente de la cantidad.
Llamada a la Salud Pública
La comunidad científica hace un llamado urgente a las autoridades de salud para que modifiquen los mensajes de prevención. El mensaje debe ser claro y contundente: solo la abstinencia total garantiza la protección contra los riesgos del tabaquismo.
El estudio también sirve como motivación para que los fumadores ocasionales abandonen completamente el hábito, demostrando que su riesgo es mucho mayor de lo que imaginan. Dejar de fumar por completo, incluso si solo se fuma en fiestas o reuniones sociales, es la única forma de mitigar el peligro.
